¿cómo actúa?
Usando una combinación de energía capacitiva y resistiva provoca un calentamiento profundo que afecta a la piel y al tejido graso subcutáneo. Y a diferencia con otras técnicas (infrarrojos o ultrasonidos), el calor va de dentro hacia fuera. Dicho calentamiento favorece:
1.- el drenaje linfático, lo cual permitirá disminuir los líquidos y toxinas que envuelven a los adipositos del tejidos celulítico;
2.- un aumento en la circulación de la zona que permitirá mejorar el metabolismo del tejido graso subcutáneo y del aspecto de la “piel de naranja”, disminuyendo el volumen corporal;
3.- la formación de nuevo colágeno (colagenogénesis), tanto en la piel como en el tejido subcutáneo, permitiendo que estas estructuras adquieran firmeza gracias a la reorganización de los septos fibrosos y engrosamiento dérmico suprayacente;
4.- y por último, tras la agresión térmica controlada con la retracción del tejido hay una respuesta inflamatoria, acompañada de la migración de fibroblastos, lo cual reforzará aún más la estructura del colágeno, dando como resultado un rejuvenecimiento de la zona tratada.
Lo que se pretende conseguir de manera gradual es la reestructuración del colágeno profundo, formando fibras nuevas que sustituyen a las envejecidas y aporten mayor elasticidad a los tejidos.
¿cómo es el tratamiento?
La duración del tratamiento es variable dependiendo el área a tratar: entre 50 y 90 minutos. Durante el tratamiento, el paciente sentirá una breve sensación de cuando la energía de la Radiofrecuencia penetra en las capas intermedias y profundas de la piel. Esto indica que el colágeno está siendo estimulado y reafirmado.
Al terminar cada sesión se presenta un ligero enrojecimiento que dura poco tiempo. Su gran ventaja es que puede continuar con una vida normal inmediatamente tras el tratamiento, evitando el sol y los UVA en las siguientes 48 horas.
¿cuándo notaré los resultados?
Resultados inmediatos: el paciente sentirá su piel más suave y más firme inmediatamente tras el tratamiento. También notará mejoría en su contorno corporal.
Mejoras continúas con el tiempo: el efecto de tensión se aprecia de forma gradual y progresiva a partir del mes de tratamiento y los resultados suelen durar aproximadamente dos años. Puede realizarse una sesión de recuerdo pasados unos meses, cuando médico y paciente lo consideren necesario.
¿para quién está indicada la radiofrecuencia?
Las indicaciones de la Radiofrecuencia son: adiposidad localizada, celulitis y flacidez en áreas como cara interna de brazos y muslos, abdomen y nalgas. Combinado con algunas técnicas quirúrgicas como la liposucción y la abdominoplastia los resultados son espectaculares.
A nivel facial es ideal para aquellas personas que presentan flacidez en la piel de cara y cuello pero no quieren someterse a un lifting quirúrgico.